El primer ministro israelí abandona la sala durante 20 minutos para atender una «llamada urgente»
MADRID, 17 Feb. –
El equipo legal del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha solicitado este lunes la incorporación de al menos 24 vistas judiciales adicionales en el juicio que enfrenta por las presuntas presiones ejercidas sobre la prensa, a la que habría sobornado para conseguir publicaciones favorables.
El abogado Amit Hadad ha enfatizado la necesidad de ampliar el periodo de audiencias ante el tribunal de Tel Aviv que está evaluando el denominado ‘Caso 4000’, donde Netanyahu está acusado de soborno, fraude y abuso de confianza por haber presionado al accionista mayoritario de Bezeq, Shaul Slovitch, a cambio de una cobertura mediática favorable en el influyente portal de noticias Walla.
Estas declaraciones se producen mientras Netanyahu se presenta nuevamente ante la corte. Sin embargo, el mandatario abandonó la sala durante aproximadamente 20 minutos debido a una llamada telefónica «urgente» relacionada con la seguridad nacional, según reporta ‘The Times of Israel’.
Hadad solicitó esta ampliación después de que los jueces pidieran acortar el tiempo destinado a abordar los ejemplos de interferencia de Netanyahu y sus asociados en la cobertura mediática. El abogado ha argumentado que tales ejemplos carecen de la relevancia necesaria para ser considerados pruebas contundentes.
En este contexto, la defensa ha propuesto dedicar menos tiempo a estas cuestiones si la Fiscalía acepta retirar algunos de estos casos, una propuesta que ya ha sido rechazada por los fiscales. Netanyahu, por su parte, ha expresado sentirse «víctima de un acoso que se extiende a lo largo de muchos años».
«Es mi derecho defenderme y ofrecer mi testimonio. La Fiscalía se niega a retirar estos casos, por lo que insisto en mi derecho a responder a cada una de las acusaciones en mi contra», ha afirmado.
Netanyahu, quien se convierte en la primera persona en la historia en ser imputada mientras ocupa el cargo de primer ministro de Israel, se enfrenta a acusaciones de recibir sobornos, fraude y violación de la confianza en tres casos distintos, tras las investigaciones dirigidas por el ex fiscal general, Avichai Mandelblit.