MADRID, 15 Nov. –
Con el paso del tiempo, las mujeres experimentan diversas etapas que pueden traer cambios en el estado de ánimo, el sueño y el bienestar general, complicando su manejo. Existen varias estrategias para enfrentarlos, algunas más conocidas que otras, y algunas que permanecen poco discutidas en entornos médicos y sociales.
UN HÁBITO ÍNTIMO CON IMPACTO INESPERADO
Una práctica íntima que muchas mujeres ya han integrado en su rutina ha demostrado tener un efecto positivo en la calidad de vida y en el control de ciertos síntomas vinculados a esta etapa de la vida adulta.
La masturbación es una estrategia valiosa para manejar los síntomas de la menopausia, específicamente los cambios de humor y del sueño, según un nuevo estudio del Instituto Kinsey de la Universidad de Indiana (Estados Unidos). El trabajo, publicado en la revista ‘Menopause’, revela que la mayoría de las mujeres están dispuestas a intentarlo, pero pocas mencionan que sus médicos se lo hayan sugerido.
Los investigadores encuestaron a una muestra demográficamente representativa de 1.178 mujeres de entre 40 y 65 años en Estados Unidos sobre sus experiencias con la menopausia y la eficacia de sus estrategias actuales para el manejo de los síntomas, incluyendo terapia hormonal, suplementos, factores del estilo de vida y placer sexual, entre otros.
Casi el 14% de las mujeres perimenopáusicas indicaron utilizar la masturbación regular como estrategia para controlar los síntomas. En general, las participantes fueron más propensas a emplear estrategias como el ejercicio (25%), la relajación (24%), la dieta (21%) y los suplementos (19%), mientras que solo un pequeño porcentaje (4%) mencionó el uso de terapia hormonal prescrita. Aproximadamente un tercio no indicó utilizar ninguna estrategia para controlar los síntomas.
CÓMO EL AUTOEROTISMO AYUDA A CONTROLAR SÍNTOMAS
Comparada con otros enfoques, la masturbación fue considerada una de las estrategias más eficaces para el alivio de los síntomas, obteniendo una puntuación de 4,35 en una escala de 5, mientras que otros cambios en el estilo de vida obtuvieron puntuaciones de 3,89-4,06. La eficacia de la terapia hormonal también fue valorada con una alta puntuación de 4,2, a pesar de su baja utilización.
Al preguntar sobre cómo la masturbación afecta síntomas específicos de la menopausia, el 46% de las participantes perimenopáusicas reportaron una mejora en al menos un síntoma de la menopausia, incluidos mejoras en el estado de ánimo (43%), un aumento de los sentimientos de deseo y placer sexual (13%), una mejora del sueño (13%), de la lubricación vaginal (11%), alivio del dolor (8%), reducción de los sofocos (3%), y otros efectos positivos (10%).
Es crucial notar que la mayoría de las mujeres perimenopáusicas (66%) afirmaron que se masturbarían más a menudo si supieran que esto podría tener un impacto positivo en sus síntomas, y más de la mitad (57%) indicaron que estarían dispuestas a probar la masturbación para aliviar síntomas si su médico se lo recomendara.
Esto resalta la importancia de mantener conversaciones abiertas y basadas en evidencia entre pacientes y profesionales de salud sobre salud sexual. Las mujeres perimenopáusicas tuvieron una probabilidad significativamente mayor que las posmenopáusicas de informar que su médico les había hablado sobre la menopausia (54% frente a 46%), sin embargo, ambos grupos reportaron bajos índices de haber recibido orientación médica sobre la masturbación (7% frente a 4%).
«Las conversaciones sobre la menopausia suelen centrarse en la terapia hormonal o los cambios en el estilo de vida, pero el autoerotismo sigue estando relegado», cuestiona la doctora Cynthia Graham, científica sénior del Instituto Kinsey. «Nuestros hallazgos sugieren que la masturbación podría desempeñar un papel importante en el control de los síntomas».
CAMBIO GENERACIONAL Y APERTURA AL BIENESTAR SEXUAL
Los investigadores también hallaron un posible cambio generacional en las actitudes hacia la masturbación, ya que las mujeres perimenopáusicas tenían una probabilidad significativamente mayor que las posmenopáusicas de haber reportado haberse masturbado en el último año y con más frecuencia. Además, mostraron ser más receptivas a utilizar la masturbación para aliviar los síntomas en comparación con las posmenopáusicas.
Sin embargo, no todas las mujeres estarán abiertas a la idea de la masturbación, independientemente de si puede ayudar a aliviar los síntomas; una de cada cinco mujeres encuestadas confesó no haberse masturbado nunca.
Este estudio, financiado por la empresa de bienestar sexual Womanizer, se suma a una creciente cantidad de investigaciones que destacan la conexión entre el bienestar sexual y el cuidado de la menopausia. Aunque un manejo efectivo de la menopausia requiere un enfoque personalizado, una combinación de estrategias, incluido el autoerotismo, probablemente genere los mejores resultados para la salud.

