Icono del sitio DGratisDigital

¿Dificultades para dormir, aumento de peso inesperado o cambios de humor? Tus hormonas son clave.

¿Dificultades para dormir, aumento de peso inesperado o cambios de humor? Tus hormonas son clave.

MADRID, 30 Jun. –

¿Por qué dos personas con la misma edad y estilo de vida pueden tener niveles hormonales tan distintos? Aunque dos personas puedan tener la misma edad y un estilo de vida similar, a menudo presentan diferencias en sus niveles hormonales debido a factores individuales.

Para entender esto, entrevistamos a Manuel Gahete, vocal de Investigación de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), un biólogo y doctor en Ciencias por la Universidad de Córdoba, que trabaja en el Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba.

Explica que la genética juega un papel crucial en la regulación hormonal, determinando cómo las glándulas secretan hormonas y cómo nuestros cuerpos responden a ellas. «El estado de salud general también es importante; condiciones subyacentes como desequilibrios tiroideos o la resistencia a la insulina pueden impactar significativamente en los niveles hormonales. Además, pequeñas diferencias en la dieta, niveles de estrés, calidad del sueño y actividad física pueden contribuir a estas variaciones», añade.

¿TENEMOS TODOS LOS SERES HUMANOS LAS MISMAS HORMONAS?

La endocrinóloga Nuria Vilarrasa, también vocal de investigación de la SEEN, comenta que todos los seres humanos tienen un conjunto básico de hormonas que regulan diversas funciones del cuerpo, como el crecimiento, el metabolismo, la reproducción, y el estado de ánimo.

«Las cantidades y tipos de hormonas pueden variar considerablemente entre individuos. Por ejemplo, los hombres suelen tener niveles más altos de testosterona, mientras que las mujeres poseen más estrógenos y progesterona. Estas diferencias son fundamentales para las características sexuales secundarias y para la función reproductiva», añade.

Vilarrasa subraya que estas variaciones no solo dependen del sexo, sino también de la edad: «Durante la pubertad hay un aumento significativo de hormonas sexuales, y durante la menopausia, por ejemplo, los niveles de estrógenos en las mujeres disminuyen. Lo mismo ocurre con la hormona del crecimiento, cuya secreción se incrementa durante la pubertad y disminuye con la edad. Incluso entre personas del mismo sexo y edad, las diferencias en los niveles hormonales pueden ser notables debido a factores genéticos, salud general y estilo de vida».

LA CANTIDAD DE HORMONAS VARÍA

Manuel Gahete sostiene que la producción de hormonas no es constante; varía a lo largo del día, durante las diferentes etapas de la vida y según el contexto en el que nos encontremos.

Por ejemplo, el cortisol, conocido como la ‘hormona del estrés’, sigue un ritmo circadiano y suele alcanzar su punto máximo por la mañana para ayudarnos a despertarnos y disminuir por la noche para facilitar el sueño.

«Durante la vida, las hormonas cambian drásticamente en momentos claves, como la pubertad, el embarazo y la menopausia. Además, factores externos como el estrés, el ejercicio, la dieta y el sueño pueden influir en nuestra producción hormonal. Por ejemplo, situaciones de estrés agudo pueden incrementar temporalmente los niveles de cortisol; mientras que la actividad física regular puede equilibrar los niveles de insulina», sostiene este investigador y miembro de la SEEN.

LOS RECEPTORES DE LAS HORMONAS TAMBIÉN CUENTAN

El doctor Joaquín Puerma Ruíz, médico especialista en endocrinología y nutrición, en una entrevista relacionada con la publicación de ‘Tus hormonas importan’ (Zenith), coincide en que no todos tenemos la misma cantidad de hormonas, y esto depende de varios factores como la salud, la composición corporal, la nutrición, el estado emocional, así como la genética.

Advierte que no solo depende de la cantidad de hormonas que tenga la persona, sino también de los receptores hormonal. «Hay personas que pueden tener una cantidad de hormonas, pero si tienen más receptores de hormonas, experimentarán más esos efectos. Si una mujer tiene gran cantidad de andrógenos y no tiene receptores para el vello, no desarrollará barba, mientras que sí lo hará si tiene receptores en esa zona», explica.

LA EDAD SÍ IMPORTA

Otro factor importante respecto a la cantidad de hormonas es la edad, ya que estas disminuyen con el tiempo, alcanzando su máximo a los 18-20 años. «En las mujeres, esto es evidente con la menopausia, y en los hombres puede comenzar a partir de los 50 años con la andropausia, un proceso menos evidente donde comienzan a disminuir los niveles de testosterona», agrega.

Vilarrasa resalta que la secreción de hormonas comienza antes del nacimiento, durante el desarrollo fetal, donde las glándulas del cuerpo se forman y producen hormonas, cruciales para el crecimiento y desarrollo. Por ejemplo, las hormonas tiroideas son esenciales para el desarrollo cerebral del feto y empiezan a secretarse aproximadamente a las 22 semanas de gestación.

«Las hormonas se secretan de glándulas específicas dispersas por todo el cuerpo, como la hipófisis, la tiroides, las glándulas suprarrenales, y las gónadas (ovarios en mujeres y testículos en hombres). Cada una de estas glándulas tiene funciones específicas y responde a diferentes señales del cuerpo para liberar hormonas en el torrente sanguíneo, donde viajan para regular procesos vitales», concluye esta doctora.

Salir de la versión móvil