MADRID, 11 Sep. –
El Comité Técnico de Árbitros (CTA) de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) anunció que el gol de **Ferran Torres** del FC Barcelona ante el RCD Mallorca no debió ser validado tras un golpe en la cabeza del defensa **Antonio Raíllo**, ya que «primero está la seguridad del futbolista». Asimismo, defendió que la «decisión acertada» de anular el tanto de **Arda Güler**, también contra el conjunto bermellón, fue por la «inmediatez» de la mano.
En sus redes sociales, el CTA compartió el primer vídeo explicativo sobre las jugadas más controvertidas de las tres primeras jornadas de LaLiga EA Sports, LaLiga Hypermotion y Liga F, dentro del espacio ‘Tiempo de Revisión’. Las jugadas fueron seleccionadas por un Comité de Asesores integrado por los entrenadores **José Luis Oltra**, **José Ramón Sandoval** y **José Luis Sánchez Vera**, junto al exfutbolista **Fernando Morientes**.
Ellos seleccionaron la acción del **Mallorca-Barça** de la jornada 1, en la que **Ferran Torres** anotó, mientras **Raíllo** estaba en el suelo tras un balonazo. «La norma es clara. Ante un golpe en la cabeza, lo primero es el jugador», expresó la portavoz del CTA, **Marta Frías**, en el vídeo. «¿Qué indica el protocolo? Que ante cualquier sospecha de conmoción cerebral, el árbitro debe detener el juego de inmediato para que el futbolista reciba atención», continuó, confirmando el error del árbitro **José Luis Munuera Montero**.
«En esta acción, el árbitro permitió que la jugada continuara, pero el golpe del defensor requería la interrupción del juego en ese momento. Solo si el disparo a portería hubiera sido justo después del impacto, el gol sería válido. Por lo tanto, la decisión adecuada habría sido detener el juego. Esta jugada enfatiza que primero está la seguridad del futbolista, luego todo lo demás», concluyó sobre la decisión.
En otra jugada del **Levante UD-FC Barcelona** en la jornada 2, el CTA confirmó que la decisión del árbitro **Alejandro Hernández Hernández** de conceder penalti por mano de **Alejandro Balde** fue correcta. «El brazo comenzaba en una posición baja, y mientras el atacante se preparaba para disparar, se eleva a un ángulo recto respecto al cuerpo. Esta posición no es natural, y ese movimiento hace que el defensor aumente deliberadamente el espacio que ocupa y bloquee un balón que iba hacia la portería», aclaró **Frías**.
Otra de las jugadas analizadas fue el gol anulado al **Real Madrid** en su partido de la **Jornada 3** contra el Mallorca en el **Bernabéu**, debido a una mano de **Arda Güler**. El jugador turco anotó tras un rebote del balón en su brazo que había sido tocado previamente por el portero bermellón. «La norma establece que el jugador comete infracción al marcar gol inmediatamente después de que el balón le toque en la mano o el brazo, incluso accidentalmente», recordó el CTA.
«En esta acción, aunque transcurre un segundo entre el disparo, por el breve tiempo que pasa y por cómo ocurre el contacto, todo forma parte de la misma jugada y cumple con el criterio de inmediatez, ya sea tras un remate o un rebote en el portero o en un poste. Por lo tanto, la anulación del gol tras la intervención del VAR fue la decisión correcta. Si el jugador madridista, en vez de disparar, hubiera pasado a un compañero que anotara, entonces el gol sería legal», añadió.
Asimismo, el CTA reconoció que el VAR en el **Deportivo Alavés-Atlético de Madrid** de la jornada 3 debió anular el tanto de **Giuliano Simeone** por fuera de juego, aunque advirtió que se trató de una acción «poco habitual». «La jugada es atípica. El portero del Alavés salió a intervenciones en el primer disparo, hubo dos rebotes y el balón terminó en gol. El VAR se centró en una posible mano del atacante, pero no evaluó la posición de fuera de juego, así que el tanto no debió ser validado», admitieron.
«Además, el sistema semiautomático de detención de fuera de juego interpretó erróneamente el toque del portero del Alavés como habilitante para el delantero, cuando realmente mantenía una posición ilegal», añadió **Frías**.
El CTA también analizó otras tres jugadas en **LaLiga Hypermotion**. En el **Sporting de Gijón-Córdoba**, el árbitro acertó al anular el penalti que había concedido inicialmente por mano de un defensor rojiblanco tras un disparo de **Ignasi Vilarrasa**.
También fue correcta la decisión de expulsar a **Carlos Pomares** del **Zaragoza** ante el **Andorra** en «una ocasión manifiesta de gol», mientras que el CTA admitió que **Franck Fomeyem** debió ser expulsado por doble amarilla tras golpear con su brazo en la cara de un adversario, «pues el movimiento es voluntario, innecesario para la acción del juego y con evidente riesgo para el contrario».