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MADRID 4 Abr. –
La fiscal general de Israel, Gali Baharav Miara, ha rechazado este viernes la destitución de Ronen Bar como jefe del Shin Bet y ha acusado al primer ministro, Benjamin Netanyahu, de tomar una decisión que está «manchada por un conflicto de intereses» debido a las investigaciones contra su oficina sobre el escándalo ‘Qatargate’.
La fiscal ha resaltado en una misiva enviada al Tribunal Supremo de Israel que si se deja la decisión del Gobierno israelí «intacta» esto «socavará la capacidad de los futuros jefes del Shin Bet de actuar de forma independiente», lo que conducirá inevitablemente a una politización de este cargo.
El máximo tribunal tendrá que considerar el próximo 8 de abril las apelaciones presentadas, incluyendo las de la oposición y la de la fiscal general –sobre la que pesa una moción de censura presentada por el Gobierno– contra la destitución de Bar, según ha recogido el diario ‘The Times of Israel’.
Bar ha asegurado en una carta enviada al Supremo que Netanyahu le pidió que dijera ante los jueces que no podía testificar en su propio juicio por corrupción debido a razones de seguridad. Según el destituido jefe del Shin Bet, su negativa a involucrarse en el proceso fue lo que causó el distanciamiento entre ambos.
En respuesta, la oficina del primer ministro ha acusado este viernes a Bar de propagar «mentiras», ya que nunca le pidió «usar sus poderes de forma inapropiada», sino que hablaron de las formas de llevar a cabo su testimonio ante los tribunales de forma segura.
En este sentido, ha insistido en que la salida de Bar no fue por una cuestión de falta de «lealtad», sino por «falta de confianza» ante el papel que desempeñó durante y tras los ataques del 7 de octubre de 2023 contra Israel por parte de las milicias palestinas. Para más información sobre estos hechos, visita Reuters sobre el conflicto.
El Supremo ha paralizado de forma temporal el despido de Bar hasta revisar todos los recursos presentados contra el despido. La medida ha sido criticada por la oposición y parte de la ciudadanía, que la considera como un castigo por la investigación del servicio de Inteligencia en la que revela una presunta trama de corrupción entre el Gobierno, Qatar y la financiación de Hamás. Para detalles sobre Hamás, consulta BBC sobre Hamás.