MADRID, 16 Mar. –
Las personas con una tendencia a la **nostalgia** tienden a tener un mayor número de amigos cercanos y se esfuerzan más en mantener sus amistades y otras relaciones que aquellas que son menos sentimentales, según un nuevo estudio realizado con casi 1.500 individuos en Estados Unidos y Europa.
Este hallazgo, publicado en la revista Cognition and Emotion, resalta la importancia de las relaciones cercanas para nuestra salud y bienestar, explican los investigadores de la Universidad de Buffalo (EE.UU.) y la Universidad de Kioto (Japón).
Estudios previos han mostrado que las personas con amigos y confidentes son generalmente más felices y tienen menos probabilidades de experimentar depresión. También tienden a tener una menor tasa de mortalidad prematura.
Formar vínculos sólidos con los demás ofrece un apoyo crucial en momentos difíciles, siendo las relaciones cercanas especialmente valiosas. Sin embargo, es notorio que nuestros círculos sociales suelen reducirse con la edad.
En este innovador estudio, los autores realizaron tres investigaciones sobre los vínculos entre la **nostalgia** y el tamaño de la red social de una persona.
En el primer experimento, un grupo de estudiantes universitarios en EE.UU. fue encuestado sobre su nivel de **nostalgia** y sus amistades. Se midió la nostalgia a través de preguntas como «¿Qué importancia tiene para ti recordar experiencias nostálgicas?» y «¿Con qué frecuencia experimentas nostalgia?». Otras preguntas indagaban sobre su motivación para hacer nuevos amigos, mantener amistades actuales y el tamaño de su círculo social.
Los estudiantes, con una edad promedio de 19 años, reportaron tener de media siete personas a quienes consideraban muy cercanas, y otros 21 que aún eran significativos para ellos.
El análisis de sus respuestas reveló que quienes se identificaron como más nostálgicos valoraban más la manera de mantener sus amistades y tenían más lazos cercanos y significativos.
El segundo experimento buscó determinar si este fenómeno también era aplicable a adultos no estudiantes en EE.UU. Un grupo de adultos respondió a las mismas preguntas que los estudiantes y realizó un breve test de personalidad.
Los participantes, con una edad promedio de 40 años, presentaron redes sociales más pequeñas que los estudiantes. En promedio, tenían cinco personas cercanas y 14 que eran importantes. Nuevamente, los más nostálgicos tendían a esforzarse más por mantener amistades y poseían más conexiones significativas, sin importar otros rasgos de personalidad, como la extraversión.
El tercer experimento se basó en datos de un estudio longitudinal realizado en los Países Bajos, el LISS (Longitudinal Internet Studies for Social Sciences), que examinó el impacto de la **nostalgia** en las redes sociales durante un periodo de siete años.
Se observó que los participantes se volvían más nostálgicos a medida que envejecían. Durante una encuesta en 2013, obtuvieron una puntuación media de 3,95 en nostalgia (en una escala de siete); para 2019, esta puntuación aumentó a 4,21.
Los que tenían puntuaciones altas o medias en nostalgia mantuvieron un número constante de vínculos sociales fuertes durante este período, es decir, personas con quienes discuten temas importantes. En contraste, quienes presentaban bajos niveles de nostalgia tenían un 18% menos de relaciones cercanas.
En conjunto, los tres hallazgos indican que la tendencia a recordar con cariño los momentos felices compartidos con otros ayuda a entender la relevancia de estas relaciones y motiva a mantenerlas.
«Las personas que experimentan **nostalgia** con más frecuencia y valoran esos recuerdos son más conscientes de sus relaciones importantes y de la necesidad de nutrirlas,” indica el investigador Kuan-Ju Huang, estudiante de doctorado en la Universidad de Kioto. “Esto sugiere que estas amistades podrían perdurar aún cuando envejecemos y nuestras vidas, intereses y responsabilidades cambian.»
Huang comparte su propia experiencia de nostalgia y cómo este sentimiento puede surgir en cualquier etapa de la vida: «Comencé mi doctorado como estudiante internacional en Japón durante la pandemia de Covid. Durante ese tiempo, noté que muchas personas, incluido yo mismo, buscaban consuelo en la música nostálgica y en videos antiguos».
«Hay evidencia que muestra que los adultos jóvenes experimentan sentimientos nostálgicos ligeramente más a menudo que los adultos de mediana edad, mientras que los ancianos tienden a presentar niveles significativamente más altos de nostalgia,” explica. “Los altos niveles de nostalgia en jóvenes y ancianos suelen tener diferentes motivaciones. Las transiciones de vida en la juventud, como salir del hogar familiar o comenzar la universidad o vida laboral, pueden hacer que se busque consuelo en la **nostalgia**.»
Según apunta, «los jóvenes adultos pueden recordar con añoranza sus años de instituto o momentos familiares, enfrentándose a los desafíos de la transición a la vida adulta. Para los adultos mayores, la **nostalgia** a menudo está relacionada con experiencias de pérdida y sentimientos de un futuro limitado».