MADRID 21 Feb. –
La **Fiscalía Anticorrupción** solicita una pena de **3 años y 11 meses de cárcel** para Carlos Neira, el perito fiscal que asesoró al exministro Rodrigo Rato en la investigación sobre su patrimonio. Se le imputa un delito de **estafa procesal** en concurso con un delito de **falsedad en documento oficial** por la elaboración de informes periciales que supuestamente incluían «manipulaciones» para disminuir las cantidades defraudadas en beneficio de su cliente. Cabe mencionar que Neira es también el abogado de Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la **Comunidad de Madrid**, Isabel Díaz Ayuso, en un asunto por supuestos delitos fiscales.
En el escrito de acusación, al que ha tenido acceso, se detalla que en dos informes periciales se “realizaron manipulaciones (…) para introducir en el procedimiento datos bancarios y financieros falsos, creando así una realidad ficticia ante el instructor y las demás partes”.
El objetivo de Neira era, según se explica, utilizar documentación manipulada para «disminuir estas cantidades, anulándolas o poniéndolas por debajo del umbral delictivo establecido en el artículo 305 del **Código Penal**».
Por estos hechos, la **Fiscalía** también solicita una multa de **330.000 euros** y la inhabilitación especial para ejercer el derecho de sufragio pasivo, así como para realizar actividades de asesoramiento contable, fiscal y jurídico por un período de **3 años y 11 meses**. Además, se pide condenar a la empresa para la que trabaja Neira, **Garrido Asesores Fiscales SL**, a una multa de **3,5 millones de euros** y una prohibición de realizar informes periciales tributarios durante **5 años**.
LOS INFORMES PERICIALES DEL ‘CASO RATO’
**Anticorrupción** señala en su escrito dirigido al Juzgado de Instrucción número 12 de **Madrid** que Neira fue perito de la defensa de Rato, quien fue condenado por la **Audiencia Provincial** de Madrid a cumplir **4 años, 9 meses y 1 día de cárcel** por tres delitos contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales y corrupción entre particulares.
En este contexto, Neira «elaboró y firmó» dos informes periciales fechados el **21 de marzo de 2016** y el **7 de junio de 2017** relacionados con «la comisión de delitos fiscales correspondientes a varios ejercicios fiscales, resultando en la denuncia que la suma de cuotas presuntamente defraudadas era de **2.369.054 euros**».
«En los dos informes se analizaban movimientos de dinero en las cuentas de Rato en el extranjero, con el fin de concluir sobre la correcta presentación de su **Declaración Tributaria Especial** (Modelo 750), conocida como ‘amnistía fiscal’, presentada ante la **Agencia Tributaria** el **30 de noviembre de 2012**», se detalla.
Se indica que esos informes «se incorporaron a las diligencias judiciales a través de escritos presentados por la defensa de Rato» y en ellos «se refutaban las cuotas establecidas por la **Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF)**, nombrada como auxilio judicial, argumentando que dicha unidad había cometido graves errores que afectaban la cuantificación de la supuesta deuda tributaria».
El fiscal destaca que el objetivo de reducir las cuotas defraudadas por Rato no se logró, ya que finalmente el exministro fue llevado a juicio y condenado.
LAS CANTIDADES «MANIPULADAS»
El fiscal explica las «manipulaciones llevadas a cabo con pleno conocimiento» de Neira, señalando que «tachó, por sí mismo o a través de un colaborador, una transferencia de **700.000 dólares** del **7 de marzo de 2008** en la cuenta de la sociedad **Red Rose Financial Enterprises** en el **BSI de Ginebra**.
También afirma que «tachó» la primera línea del extracto bancario del **30 de junio de 2008** en la cuenta de la **sociedad Red Rose Financial II** en el **BSI de Bahamas**, que correspondía a una entrada de dinero cuyo importe se desconoce, pero que facilitó diversas adquisiciones de activos financieros por un total de **453.577 euros**.
Además, señala un tercer tachón en la última línea del extracto bancario del **30 de junio de 2008** en la misma cuenta, relacionado con una operación del **15 de marzo de 2008**.
Una cuarta manipulación se produjo en su informe de **7 de junio de 2017**, donde presentó «una fotocomposición de la adquisición de dos activos financieros».
«La compra de los **234.783 valores** no está reflejada en ninguno de los documentos de los informes periciales de Neira y tuvo que extraerse de un documento encontrado en uno de los registros realizados», añade.
EL PAPEL DE GARRIDO ASESORES
Por otro lado, respecto a la asesoría en la que trabaja Neira, el fiscal argumenta que «permitió, debido a una grave falta de control, que el acusado elaborara para su presentación en el juzgado informes que se sustentaban en documentación bancaria manipulada».
Asimismo, critica la falta de «modelos documentados de organización y gestión con medidas adecuadas de control para prevenir la posible comisión de engaños en un proceso penal mediante documentos fraudulentos». Se agrega que tampoco «ha demostrado documentalmente que algún órgano, ya sea interno o externo de la sociedad, supervise el cumplimiento de una normativa preventiva inexistente».
Fuentes jurídicas indican que Neira ya ha recurrido su procesamiento en este caso, argumentando que en la sentencia contra Rodrigo Rato ya se reconoce que los documentos de trabajo de Neira estaban presentes en la causa desde el inicio.
“La documentación contiene el documento que refleja la transferencia (…) y por lo tanto está desde el inicio de las actuaciones”, se argumenta en un extracto del recurso accesible a esta agencia.
Además, citan la sentencia de Rato, que apunta que “no se puede interpretar que esos ingresos en cuentas del BSI Ginebra tengan un origen desconocido y, por ende, representen un incremento patrimonial no justificado de Rodrigo Rato”.
Tras esto, las fuentes jurídicas sugeridas afirman que si los documentos completos han estado en la causa desde el inicio y luego se proporcionaron los documentos bancarios completos del exministro, las notas tachadas por Neira no pueden constituir una **estafa procesal**.