MADRID 27 Dic. (EUROPA PRESS) –
**Enfermedades dermatológicas** como la rosácea, blefaritis, dermatitis atópica y psoriasis pueden provocar **sequedad ocular**, especialmente cuando estas afecciones impactan la zona facial, ya que pueden interferir con el funcionamiento de las glándulas de meibomio, esenciales para la secreción de la capa lipídica de las lágrimas, según han señalado **oftalmólogos del Grupo Miranza**.
En particular, la rosácea se presenta frecuentemente en pacientes con **ojo seco**. «Hasta un 20 por ciento de los pacientes con rosácea ocular no muestran signos de rosácea facial. La rosácea ocular se manifiesta con inflamación palpebral (en el párpado), enrojecimiento ocular, sensación de sequedad, orzuelos recurrentes, fotofobia e incluso úlceras corneales», ha precisado la especialista **Ane Pérez**, de **Miranza Begitek**.
Otra afección común en la piel del párpado es la **blefaritis**, una inflamación crónica de las glándulas de meibomio que genera inflamación e irritación en los párpados, ocasionando así **sequedad ocular**. La blefaritis, también conocida como disfunción de las glándulas de meibomio, es un problema crónico que afecta a muchos pacientes con **ojo seco**.
En relación con la **dermatitis atópica**, caracterizada por piel seca, el sistema inmunológico reacciona de manera exajerada o inapropiada, lo que puede afectar las glándulas lacrimales y contribuir a **la sequedad ocular**. Además, el síntoma principal de esta patología es el picor, y el frotamiento de los párpados puede ser una causa significativa de blefaritis, que a su vez puede desencadenar **ojo seco**.
La **sequedad ocular** también es común entre los pacientes con **psoriasis**. Esta enfermedad inflamatoria crónica de la piel puede interferir con el funcionamiento de las glándulas lagrimales, encargadas de mantener la hidratación ocular.
TRATAMIENTOS Y RECOMENDACIONES
La oftalmóloga **María Gessa**, de **Miranza Virgen de Luján**, ha indicado que tratamientos como lágrimas artificiales, exfoliación, nutrición específica, derivados hemáticos o antiinflamatorios permiten a los pacientes con **ojo seco** mantener una buena calidad de vida.
En cuanto a los tratamientos más innovadores para la **sequedad ocular**, Ane Pérez ha mencionado la **luz pulsada intensa**, que actúa en la piel periocular y alivia los síntomas de esta condición, ya que «tiene un efecto antiinflamatorio y estimula el drenaje de las glándulas, mejorando así la calidad de la película lagrimal y la lubricación ocular». Esto no solo favorece la salud ocular, sino también la de la piel periocular.
Además de los tratamientos en consulta, los especialistas enfatizan que las personas con **ojo seco** deben seguir una serie de recomendaciones diarias, como tomar descansos frecuentes al usar pantallas, parpadear regularmente, usar gafas con protección UV, llevar una dieta rica en omega-3 y evitar ambientes con aire acondicionado o calefacción excesiva.
«Aquellos que sufren de **sequedad ocular** deben entender que no se trata solo de aplicar una lágrima artificial, que solo aborda los síntomas, pero no la causa», ha enfatizado **Alejandra Amesty**, de **Vissum Grupo Miranza**.
IMPACTO DEL OJO SECO EN LA CALIDAD DE VIDA
La **sequedad ocular** es una condición que afecta a **cinco millones de personas en España** y tiene repercusiones significativas en la calidad de vida. Según los profesionales, complica tareas cotidianas como la lectura, el trabajo con pantallas y la conducción. A su vez, puede provocar molestias, problemas visuales y, en algunos casos, lesiones en la superficie ocular que dañan la córnea y la conjuntiva.
Además, han destacado el impacto emocional que puede conllevar esta condición, ya que el paciente puede experimentar cambios de ánimo debido al dolor crónico y dificultades para dormir, lo que puede desembocar en procesos depresivos. Por ello, se aconseja consultar a un **oftalmólogo** ante signos de **sequedad ocular** para recibir un diagnóstico preciso sobre el tipo de **ojo seco** que padecen y el tratamiento más adecuado para aliviar sus síntomas.
Más información sobre el ojo seco