Pide al Consejo General de Muface que supervise esta situación
MADRID, 15 Abr. –
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha advertido de que las aseguradoras sanitarias han reducido la calidad asistencial en las mutuas de funcionarios, a pesar del acuerdo alcanzado con el Gobierno, por lo que solicita a la Administración y a los grupos políticos que intervengan para garantizar la calidad y que «los funcionarios no sean asegurados de segunda categoría».
Según CSIF, hay información de que las negociaciones entre aseguradoras y proveedores sanitarios (asociaciones médicas y grupos hospitalarios) están en una situación «muy delicada». Esta negociación concluirá el próximo día 23.
El sindicato destaca que, a pesar de recibir un «incremento sustancial» del 41,2 por ciento en la prima por parte del Gobierno para hacer más atractivo el contrato, este aumento no se está reflejando en las tarifas de médicos y hospitales.
En este contexto, recuerda que esto ya ha provocado la retirada de HM Hospitales en los convenios de Mugeju e Isfas en Cataluña (mutuas de la Justicia y de la Defensa), así como la disminución general de la oferta médica. Además, señala que ha conocido la retirada de otro grupo hospitalario (Quirón Salud) del convenio de Isfas por parte de Adeslas.
«Estas salidas, que se suman a la retirada de la aseguradora DKV del último concierto con las mutuas, son un grave precedente y otros hospitales podrían tomar la misma decisión si no cambia esta situación. Sanitas y Mapfre tampoco accedieron a participar en Mugeju por no llegar a acuerdo con las aseguradoras», agrega el sindicato.
Por este motivo, consideran que la Administración debe intervenir para garantizar la calidad de la oferta sanitaria. «Los mutualistas deben tener derecho a la misma cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud, pero la retirada de estos hospitales, algunos de ellos punteros en el tratamiento de enfermedades oncológicas, puede poner en cuestión la calidad y convertir a los mutualistas en pacientes de segunda categoría. Pedimos al Consejo General de Muface que intervenga para supervisar esta situación», agrega.
En este sentido, CSIF advierte que el modelo del mutualismo administrativo ha sido salvado por todas las partes y «no tiene sentido que ahora no se traslade una correcta financiación a médicos y hospitales, por una posición cicatera de las aseguradoras».
«No lo vamos a consentir y desde CSIF vamos a intensificar nuestra interlocución hasta el día 23, cuando se cierren los acuerdos de previsión sanitaria para Muface. Muface firmará el concierto sanitario para los próximos tres años, previsiblemente después de la Semana Santa, y entrará en vigor en mayo», afirman.
CSIF exige al Gobierno que garantice a largo plazo la viabilidad del mutualismo administrativo, que consideran que ha funcionado eficazmente durante décadas, pero que «debe recuperar la calidad perdida en la asistencia sanitaria por la falta de financiación de los últimos conciertos». «No aceptamos que el informe de la AiREF hecho público recientemente se utilice como excusa para desmantelar el modelo», finaliza.