MADRID, 21 Ene. –
El entrenador del Girona FC, Míchel Sánchez, ha afirmado que espera llegar a la última jornada de la fase de liga de la Liga de Campeones con al menos «posibilidades mínimas» de luchar por estar en octavos. Esto pasa por ganar este miércoles al AC Milan en San Siro (21.00 horas), y ha descartado rotaciones porque «el prestigio del club está por encima de todo».
«Al principio de la Champions hablábamos de que nueve o diez puntos te metían en la siguiente fase. Ahora solo hay una oportunidad de conseguir esos nueve puntos, que es ganando los dos partidos. Puede que ni así, pero seguro que ganando mañana te metes en la posibilidad de que en el último partido esté todo en el aire. Quiero ir a esa última jornada con posibilidades mínimas. Cada uno tiene sus objetivos. El nuestro es llegar vivos a la última jornada, y para lograr eso, necesitamos ganar mañana», declaró en rueda de prensa.
En este sentido, subrayó que «no» ve «miedo escénico» en sus futbolistas. «Evidentemente, la dificultad existe porque hay un gran rival y habrá momentos de sufrimiento, pero si sufrimos juntos será todo más sencillo. Tanto con balón como sin balón, debemos ser un equipo con una mentalidad colectiva. Si logramos eso, tengo la sensación de que haremos un gran partido», expuso.
Todo ante «un equipo histórico» que ofrece «suficientes alicientes más allá de la clasificación para hacer un gran partido». «Esto nos sirve para ganarnos el prestigio que el Girona, por crecimiento, está buscando. Debemos demostrar que en esta Champions, aunque por números o resultados no hayamos estado a la altura que queríamos, sí hemos competido en muchos partidos y queremos seguir haciéndolo. El Milan se juega mucho, y nosotros, si hay una mínima posibilidad, debemos luchar por ella. Esto pasa por hacer un gran partido y conseguir una victoria que nos daría una opción mínima, la de vivir una última jornada en casa con una posibilidad de poder entrar en la siguiente fase, y eso para nosotros es un sueño», afirmó.
Por lo tanto, advirtió que intentarán ser «protagonistas». «Es un partido de máxima exigencia, necesitamos 16 jugadores, los 11 titulares y cinco sustituciones, porque si queremos mantener un ritmo alto de partido, tenemos que intentar recuperar el balón al Milan y vamos a defenderlo lo más arriba posible. Nuestra intención es ser protagonistas y para eso necesitamos el 100% en cada acción y en cada momento del partido, y seguramente necesitaremos los cinco cambios», subrayó.
«La intención es dominar más el balón y asegurarnos de que ellos también tengan que preocuparse por la fase defensiva. Si vemos un equipo concentrado en nuestra área, con el ataque que tiene el Milan, será muy difícil de detener en 90 minutos. Necesitamos contrarrestar eso con nuestro ataque», prosiguió.
Por otra parte, el preparador madrileño reiteró que «no» contempla rotaciones. «Venimos de jugar el sábado y hay tiempo suficiente para recuperarnos. Nos jugamos el 100% de la posibilidad de clasificación, solo nos vale ganar y el prestigio del club está por encima de todo. De sábado a mañana a las nueve de la noche hay tiempo suficiente para descansar y para que los jugadores estén al 100%. Buscaremos el mejor once posible para ganar el partido», indicó.
«Actualmente, estamos capacitados para jugar dos partidos por semana y afrontar este encuentro con una energía del 100%. Evidentemente, en la primera vuelta nos costó más porque hubo muchos momentos en los que, debido a lesiones o situaciones de la competición, no tuvimos prácticamente descanso ni la capacidad de entrenar para recuperar jugadores. A nivel de exigencia física y mental, no es un partido al que lleguemos con ningún tipo de desgaste. No es una excusa que hayamos jugado el sábado, creo que hay suficiente tiempo para recuperarse y hacer un gran partido», continuó.
Respecto a la plantilla, comentó que el delantero neerlandés Arnaut Danjuma «está al 100%» y que tanto Bojan Miovski como Miguel Gutiérrez «siguen su proceso de recuperación del tobillo». «Veremos si son capaces de llegar al domingo contra el Rayo Vallecano«, apuntó.
Además, se identificó como clave para encontrar la mejor versión de sus jugadores. «Cuando hablo de la mejor versión de los jugadores, siempre me miro a mí primero, al construir una idea de juego, al interpretar un partido o al centrarme en cada jugador. Necesito sacarles el máximo rendimiento en el día a día para que en la competición no tengan sorpresas y que su respuesta sea colectiva (…) Soy el máximo responsable de la mejor versión de Viktor Tsygankov, soy el máximo responsable de la mejor versión de Abel Ruiz, soy el máximo responsable de la mejor versión de Cristian Stuani. Si no han podido mostrar su mejor versión, la responsabilidad es mía», expresó.
En otro orden de cosas, espera que, si quedan eliminados matemáticamente, puedan volver «a un escenario como este más pronto que tarde». «El club ha dado pasos hacia adelante, quizás a nivel deportivo hemos crecido más rápido. El Girona es un club que está haciendo las cosas muy bien y queremos tener la oportunidad de disputar partidos como este en un futuro cercano. Venir aquí para nosotros es un sueño y para la afición también, pero también es una competición que nos indica que si conseguimos un resultado positivo podemos seguir soñando. Vamos a ver si somos capaces de enfrentarnos a todo un Milan y mantener nuestra personalidad e identidad para hacer un gran partido e intentar sumar los tres puntos», deseó.
«Para consolidar el proyecto, la estabilidad del club pasa por estar en Primera División, y estamos en camino de lograrlo. Luego están los recursos humanos, las personas que están trabajando en el Girona; todos tienen motivación, ilusión y mentalidad de crecimiento, estar en un proyecto como este es muy importante (…) A nivel deportivo, el salto de calidad que dimos el año pasado ha sido demasiado rápido, pero las bases están puestas para que el Girona sueñe con estar en Primera División muchos años y pueda vivir experiencias como esta en el futuro», concluyó.