
MADRID, 26 Oct. (EDIZIONES) –
Algunos individuos presentan una reacción bastante interesante y completamente involuntaria al exponerse a una luz intensa, como la del sol o una fuente luminosa muy brillante, lo que provoca que estornuden repentinamente una o varias veces. Este fenómeno, conocido como ‘reflejo fótico’ o ‘estornudo fótico’, se denomina coloquialmente como ‘Síndrome ACHOO’, un acrónimo en inglés de ‘Autosomal Dominant Compelling Helio-Ophthalmic Outburst’.
«Esto ocurre porque los nervios que controlan los ojos y la nariz están próximos, y, en ciertos casos, al recibir esta intensa estimulación visual, se activa también el nervio responsable del estornudo. Así es como algunas personas pueden estornudar al observar una luz brillante», comenta en una entrevista con Europa Press Infosalus el doctor Leovigildo Ginel, secretario del grupo de trabajo de Respiratorio de SEMERGEN.
El reflejo fótico, también conocido como ‘reflejo solar del estornudo’, se produce, según el doctor, cuando una luz intensa, generalmente la solar, activa de manera involuntaria el reflejo de estornudo: «Si bien el mecanismo exacto no se comprende completamente, se piensa que la luz estimula el nervio óptico y, simultáneamente, activa el nervio trigémino, que es el que controla el reflejo del estornudo. Este fenómeno es más frecuente en personas con ojos claros, aunque puede suceder en cualquier individuo».
UN REFLEJO HEREDITARIO Y FRECUENTE EN LA SOCIEDAD
El estornudo desencadenado por la luz intensa parece tener un componente hereditario, tal como reconoce el doctor Ginel, quien señala que se ha observado que suele transmitirse de padres a hijos. Por lo tanto, si uno de los progenitores experimenta este fenómeno, es probable que los descendientes también lo hagan. «Así, parece existir un componente genético en este reflejo, el cual se denomina técnicamente como Síndrome Autosómico Dominante de Irrupción Helio-Oftálmica Compulsiva«, dice.
Además, se estima que entre un 20% y un 35% de la población presenta este reflejo. «No hay evidencia concreta de que sea más común en un género que en otro, ya que parece afectar a ambos de manera similar», aprecia el especialista del grupo de trabajo de respiratorio de SEMERGEN.
Al ser preguntado si este reflejo involuntario de estornudar también se activa al consumir alimentos picantes, Ginel aclara que «no necesariamente», precisando que el reflejo fótico es independiente de la reacción a la comida especiada. «Sin embargo, algunas personas pueden experimentar estornudos al consumir alimentos muy especiados, debido a una reacción en las terminaciones nerviosas de la boca y de la nariz, aunque no está directamente relacionado con el síndrome ACHOO», añade.
SITUACIONES CON LAS QUE TENER CUIDADO
Aunque no existe un tratamiento específico para el síndrome ACHOO, ya que no se considera una enfermedad, sino más bien un reflejo benigno, como aclara este médico de atención primaria, para aquellos que sufren de este fenómeno y que podría implicar un riesgo en situaciones como la conducción, se sugiere el uso de gafas de sol para mitigar la exposición a luces intensas y prevenir el estornudo.
«También es útil identificar las condiciones que lo desencadenan para poder tomar las precauciones adecuadas», subraya el doctor Ginel, del grupo de trabajo de Respiratorio de SEMERGEN.
Es importante señalar que, a pesar de que el estornudo fótico puede resultar incómodo, no representa un riesgo para la salud. «Sin embargo, para algunas personas, puede ocasionar molestias en situaciones cotidianas. La concienciación y las medidas preventivas, como evitar mirar directamente al sol o usar gafas protectoras, son las mejores formas de manejar este fenómeno», agrega.
QUÉ ES EL ESTORNUDO Y POR QUÉ SE PRODUCE
Por último, este experto recuerda que el estornudo es un mecanismo de defensa natural del cuerpo, que se activa, en su forma más común, cuando algo irrita el revestimiento interno de la nariz: «Esto provoca una expulsión rápida y abrupta de aire para eliminar esa sustancia irritante, que puede incluir polvo, polen, bacterias u otros elementos que deseamos expulsar para proteger nuestras vías respiratorias».
Las causas más frecuentes de estornudos incluyen alergias, resfriados, irritantes como el humo o el polvo, o cambios abruptos de temperatura cuando el aire frío entra de forma repentina en las fosas nasales, además de algunas infecciones virales. «En tales casos, el cuerpo detecta algo extraño en la nariz y reacciona expulsándolo rápidamente mediante el estornudo», concluye el doctor Ginel.



