FIAPAS lanza la campaña ‘Que lo Escuche Todo el Mundo‘ para ‘dar el salto’ hacia la detección precoz
MADRID, 27 Sep. (EUROPA PRESS) –
La sordera posnatal es toda pérdida de audición que se detecta fuera del periodo perinatal, afectando a niños de 2, 3 y 4 años, y que no se ha podido detectar con el cribado neonatal. Por ello, es esencial el papel de los colegios para alertar sobre posibles problemas auditivos, permitiendo su tratamiento a tiempo y evitando su progresión, según ha señalado el presidente de la Comisión para la Detección Precoz de la Sordera, el doctor Faustino Núñez Batallas.
«Este tipo de sorderas se pueden detectar a través de la sospecha familiar, que ha sido el caso más evidente, o por parte del profesorado. También pueden identificarse en revisiones pediátricas o mediante programas de salud escolar», ha explicado el doctor Núñez durante la presentación de la campaña ‘Que lo Escuche Todo el Mundo‘ y su lema ‘#DaElSalto‘, lanzada por FIAPAS para fomentar la detección precoz de la sordera en niños.
«La sordera posnatal afecta a niños de 2, 3 y 4 años que no oyen correctamente. Es un reto y frustrante porque uno se pregunta ‘¿para qué sirve el cribado neonatal?’, que solo detecta las sorderas congénitas y neonatales. Hay sorderas tan leves que los aparatos no son capaces de detectarlas y que progresan en el tiempo», ha agregado el doctor Núñez.
Según el experto, estas sorderas pueden ser por un problema genético o por una infección por citomegalovirus, donde el niño oía normalmente al nacer, pero posteriormente desarrolló la sordera. «También existen sorderas adquiridas, como las que ocurren tras infecciones o caídas en la cabeza», ha afirmado.
Por otro lado, el doctor ha enfatizado que la falta de detección precoz de las sorderas posnatales se debe a «fallos en el sistema de detección precoz de la sordera congénita», incluyendo problemas organizativos que impiden realizar el cribado y la pérdida de niños en el proceso.
Así, ha subrayado que la detección precoz de la sordera es coste-efectiva ya que, según un estudio publicado en junio de 2024 en Suecia, el principal motor de consulta fue «la detección activa mediante pruebas a la población, es decir, el cribado en niños al inicio de la escuela».
«A la edad de escolarización, se realizaron pruebas y se detectó el 40% de las sorderas posnatales, mientras que solo el 10% fue detectado por las familias y pediatras», ha señalado, enfatizando que «sin pruebas activas que busquen problemas auditivos en una población aparentemente sana, estos quedarán desapercibidos».
Ha añadido que estos problemas auditivos pueden ser de gravedad media, leve o unilaterales, pero «tendrán un impacto significativo en el desarrollo del niño, especialmente en sus estudios y problemas de lectura».
El subdirector adjunto de Cooperación Territorial e Innovación Educativa del Ministerio de Educación y Formación Profesional, Eladio Sánchez, ha comentado que «la escuela es un entorno privilegiado para la detección y atención temprana de estas circunstancias», aunque esta detección debe «trascender al ámbito social y sanitario» para lograr una coordinación multidisciplinar.
Como parte de la campaña ‘Daelsalto‘, FIAPAS ha compartido el testimonio de una maestra y logopeda, quien enfatiza que «no detectar una sordera tempranamente afecta globalmente», ya que «el lenguaje es esencial para construir pensamiento, madurar y reflexionar».
«Si no se diagnostica a tiempo, en cursos con mayor carga lectiva esto va a afectar a los niños, quienes no son conscientes de que están perdiendo información», detalla. Un síntoma puede ser que «el niño observe mucho la boca de la otra persona al hablar», lo que indica que se está apoyando en eso para entender. «A menudo, los niños discuten con compañeros o no se integran solo porque no se entienden entre sí», añade, destacando que una vez diagnosticados y tratados con audífonos o terapia, «su personalidad cambia, se vuelven más alegres, cariñosos y sociables».
FIAPAS ‘DAELSALTO‘ HACIA LA DETECCIÓN PRECOZ
El evento fue conducido por dos niños del Movimiento Asociativo de Familias de Personas Sordas (FIAPAS), quienes compartieron su experiencia tras ser diagnosticados de sordera posnatal a los 2 años porque no se realizaron las pruebas al nacer, y fueron sus padres quienes se dieron cuenta un año después de que «no oían como otros niños». Ahora, ambos cuentan con implantes cocleares y han asegurado ser «felices» gracias a sus profesores y logopedas.
Durante el acto, se proyectó un spot en el que varias familias con niños con sordera posnatal lanzan mensajes como: «Da el salto hacia evaluaciones auditivas periódicas; da el salto hacia tratamientos tempranos; da el salto hacia la identificación de signos de alerta; da el salto hacia el protocolo de cribado a lo largo de la infancia», entre otros.
«Desde FIAPAS, hacemos un llamado para que nuestro país dé un salto significativo, superando el actual umbral de los programas de detección precoz de la sordera neonatal y que se amplíe la detección, tratamiento y seguimiento de las sorderas infantiles a lo largo de la edad pediátrica. Como se ha evidenciado hoy, este es un problema grave de salud pública, con consecuencias educativas que pueden comprometer la igualdad de oportunidades en el ejercicio del derecho a la educación de los menores y adolescentes con sordera no detectada o no tratada adecuadamente y a tiempo», ha declarado la presidenta de FIAPAS, Mª Carmen Sacacia Araiz.
Para más información, consulta sordera posnatal y detección precoz de la sordera.
