Vox ha informado que la salida del exvicepresidente se debe a su negativa a firmar la expulsión de estos miembros.
MADRID, 3 Feb. –
El exlíder de Vox en Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha enfatizado este lunes que su dimisión no está relacionada con la expulsión de dos procuradores díscolos, acusando a Vox de «manipular sus palabras» tras el anuncio de la dirección del partido que su salida es consecuencia de su negativa a firmar dicha expulsión.
García-Gallardo y Vox presentan versiones contradictorias sobre la renuncia del exvicepresidente regional. En la carta en la que declaró su salida, García-Gallardo aclara que su decisión es «independiente» de la de los dos procuradores expulsados del grupo parlamentario de Vox en las Cortes de Castilla y León por cuestionar decisiones nacionales. Además, menciona «discrepancias» con la Ejecutiva del partido.
Por otro lado, el portavoz nacional de Vox, José Antonio Fúster, ha declarado en una rueda de prensa que García-Gallardo se ha negado a firmar la expulsión de los disidentes. Rechazó implicarle en una operación destinada a «socavar el partido», pero destacó que no condena dicha acción.
Más tarde, García-Gallardo se expresó en la red social X (anteriormente Twitter), manifestando que «siente que algunos estén intentando manipular sus palabras», aunque no precisó nombres. Además, subrayó que «no apoya en absoluto los motivos que han llevado a dos de sus antiguos compañeros a desafiar públicamente a la dirección del partido». Adjunto a su mensaje, compartió la sección de su misiva donde explica que su decisión es «independiente» de las acciones de sus compañeros.
El exlíder de Vox en Castilla y León, que continuará su labor como abogado y seguirá en Vox como afiliado «raso», ha enfatizado la importancia de «seguir apoyando» al partido liderado por Santiago Abascal. «Es lo que voy a hacer yo, por el bien de España», concluyó.