MADRID 20 Feb. –
La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) estima que más de 1,9 millones de niños de 14 años y menos carecen de un pediatra de Atención Primaria de referencia en su centro de salud, una cifra que supera la del último estudio de 2018, cuando eran 360.000 pacientes.
Así lo ha señalado el presidente de AEPap, Pedro Gorrotxategi, quien ha expresado su preocupación por el deterioro de la situación en los últimos años, indicando que de los 1,9 millones de niños sin pediatra en AP, «cerca de 600.000 no tienen ningún médico», lo cual es considerado «muy grave».
La Asociación también ha alertado que ninguna comunidad autónoma garantiza a los niños y adolescentes el derecho a contar con un pediatra de Atención Primaria que les atienda en su centro de salud. «Esto indica que a las CCAA no les importa que los niños sean atendidos por pediatras en AP», criticó Gorrotxategi.
Estos son algunos datos presentados durante la presentación del 21º Congreso de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), que se lleva a cabo en Madrid del 20 al 22 de febrero. Para más información sobre el evento, puedes consultar este enlace.
En este sentido, el presidente de la Asociación resaltó la necesidad de contar con un pediatra de Atención Primaria que «vele por la salud de los niños y les atienda en los procesos agudos y crónicos», lo cual considera un «derecho«.
En 2018, AEPap realizó un estudio sobre el número de plazas de Pediatría de AP sin médico especialista asignado, que representaban un 26%, lo que equivale a 1.729 plazas de Pediatría. «En ese informe advertimos que era muy importante dotar a la Pediatría de Atención Primaria de más especialistas en Pediatría», recordó Gorrotxategi. Puedes leer más sobre el estudio en este enlace.
La AEPap ha llevado a cabo una nueva revisión de los datos de plazas sin especialista, incluyendo plazas ocupadas por médicos no especialistas y las bajas que no están cubiertas. Estos resultados muestran que la demanda de pediatras en Atención Primaria ha aumentado a aproximadamente 2.130, lo que representa un déficit del 32%.
Según la información de AEPap, Castilla-La Mancha posee el mayor porcentaje de plazas de Pediatría de Atención Primaria sin especialista, siendo un 57,3%, seguida por la Comunidad Valenciana (44%), Andalucía (42,9%) y Murcia (37,8%). En contraste, Cantabria es la región con menos déficit (2,5%), seguida de Aragón (8,6%), Asturias (10,5%) y La Rioja (12%).
AUMENTAN LAS PLAZAS DE PEDIATRÍA HOSPITALARIA
La Asociación también considera que la reducción de pediatras de AP está relacionada con el creciente número de plazas de Pediatría hospitalaria. En los últimos 14 años, según datos oficiales del Ministerio de Sanidad y las CCAA, las plazas hospitalarias para pediatras han crecido un 36%.
«Este aumento no ha sido uniforme en todas las comunidades autónomas», manifestó el presidente de AEPap. Las comunidades que más han incrementado sus plazas hospitalarias (más del 35%) son Madrid, Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana, Murcia, Navarra, Cantabria y Canarias, coincidiendo con las CCAA que tienen un mayor exceso de pacientes por pediatra, según el Ministerio.
De acuerdo con estos datos, en 2024, Madrid, Cataluña y Baleares eran las CCAA que registraban el 50% de los pediatras de AP atendiendo cupos superiores a 1.000 pacientes, sobrepasando así el límite recomendado por el Ministerio de Sanidad para sus pediatras. Puedes consultar más sobre este tema en el Ministerio de Sanidad.
También se observa que varias de las CCAA con mayor creación de plazas hospitalarias son las que tienen menores porcentajes de residentes que logran acceder a su puesto de trabajo en el centro de salud: Madrid, Cataluña, Cantabria y Comunidad Valenciana, según un estudio de AEPap sobre las salidas profesionales de los residentes entre 2014 y 2017.
Esto genera un efecto «de pez que se muerde la cola», según Gorrotxategi. «Al haber plazas de Pediatría de AP con un exceso de niños asignados, la elevada demanda hace que no puedan ser atendidos adecuadamente en su centro de salud, lo que a su vez incrementa la demanda en urgencias y, por ende, aumentan las plazas de Pediatría hospitalaria».
«Pero este incremento no resuelve el problema», advirtió, ya que «el desplazamiento de la atención del centro de salud al hospital implica un encarecimiento de la asistencia y elimina la cercanía familiar, además de ofrecer atención en un entorno alejado del niño».
Entre las soluciones propuestas por AEPap, se incluyó solicitar un aumento de plazas MIR, «con la esperanza de que al aumentar las plazas, también aumentaran los residentes en Primaria, pero no ha sido así, ya que los hospitales absorben la mayoría de los nuevos residentes en Pediatría».
Los incrementos de plazas MIR en 2015 y 2016 coincidieron con un aumento de plazas hospitalarias entre 2017 y 2020, resultando en que muchos de los MIR de Pediatría terminan en el hospital. La escasez de pediatras en centros de salud, cada vez más denunciada por las familias en distintos barrios y localidades, se ha transformado en una situación crónica, concluyó Gorrotxategi.
MÁS TRASTORNOS DEL ESPECTRO AUTISTA
Durante el Congreso, los expertos abordarán varios temas, incluyendo el incremento de los trastornos del espectro autista (TEA), un diagnóstico cada vez más común en los centros de salud, como explicó la vocal de AEPap en Castilla-La Mancha, Eva Ximénez.
«Este aumento podría deberse a la edad de los padres y factores ambientales, aunque aún se están determinando las causas», añadió Ximénez.
«Nos hemos propuesto discutir este asunto en nuestro congreso porque persiste un significativo infradiagnóstico, especialmente en niñas, y es un tema en el que podemos desempeñar un papel crucial desde nuestras consultas de Atención Primaria», aseveró.
Además de los TEA, en el Congreso de AEPap también se abordarán otros temas relevantes, como el aumento en las urgencias psiquiátricas, tanto en Atención Primaria como en hospitales, que se ha observado desde la pandemia de Covid-19 y que continúa vigente. Los trastornos de la conducta alimentaria, autolesiones e ideación suicida son responsables de una gran parte de estas urgencias.