MADRID 14 Abr. –
Un grupo de investigadores internacionales, liderados por la **doctora Inmaculada Aguilera-Buenosvinos** del departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, ha descubierto que una **alta adherencia a la dieta mediterránea** reduce en un seis por ciento el riesgo de desarrollar algún **cáncer relacionado con la obesidad**.
Los científicos han señalado la «modesta reducción» del riesgo de este tipo de cáncer, incluyendo el adenocarcinoma de esófago, el **cáncer de mama en mujeres tras la menopausia**, el cáncer colorrectal, el cáncer de útero y de ovario, el cáncer de vesícula, algunos cánceres de estómago, cáncer de páncreas y tiroides y meningioma, todo ello independientemente de las medidas de adiposidad.
«Uno de los hallazgos más relevantes es que la reducción del riesgo de cáncer no está mediada por el **Índice de Masa Corporal (IMC)** ni por la relación cintura-cadera, lo que sugiere que los efectos protectores de la **dieta mediterránea** van más allá de la simple regulación del peso», ha explicado la doctora Aguilera-Buenosvinos.
El estudio, publicado en la revista JAMA Network Open, ha analizado los datos de la cohorte EPIC (Investigación prospectiva europea sobre el cáncer y la nutrición), que ha seguido a más de 450.000 personas en diez países europeos durante casi 15 años, evaluando la dieta de los participantes a través de cuestionarios validados y asignando una puntuación de 0 a 9 según su nivel de seguimiento de la **dieta mediterránea**.
La investigadora ha señalado que los resultados ponen «de manifiesto» la necesidad de promover **patrones de alimentación saludables** en la población general, ya que las personas con un alto grado de adecuación al patrón mediterráneo clásico (7-9 puntos) tenían un menor riesgo de desarrollar estos tipos de cáncer en comparación con aquellos con una baja conformidad con la dieta mediterránea (0-3 puntos). Para más información sobre la **dieta mediterránea**, puedes consultar este recurso en la OMS.
«Estos resultados refuerzan la idea de que la dieta mediterránea puede contribuir a la prevención del cáncer a través de mecanismos adicionales, posiblemente relacionados con su **efecto antiinflamatorio** y su riqueza en **antioxidantes**, entre otros», ha afirmado la investigadora en CIBEROBN y en IdiSNA, la doctora **Esteganía Toledo**.
Los investigadores, que han trabajado con el apoyo de la International Agency for Research on Cancer y diversas instituciones de investigación europeas, han insistido en la importancia de seguir explorando los **mecanismos biológicos** que expliquen los beneficios de la dieta mediterránea en la reducción del riesgo de cáncer.