MADRID, 7 Ene. (EUROPA PRESS) –
Un equipo de investigadores de la Universidad de Trento (Italia) ha examinado muestras biológicas de 21.561 individuos (veganos, vegetarianos y omnívoros) que residían en Estados Unidos, Reino Unido e Italia, descubriendo que el patrón dietético ejerce una fuerte influencia sobre el microbioma intestinal y en microbios intestinales específicos que se asocian con una mejor salud. Los hallazgos son publicados en Nature Microbiology.
El microbioma intestinal, el conjunto de microorganismos que habitan en nuestro intestino, desempeña un papel crucial en la determinación de la salud de una persona, ya que influye en muchos aspectos, desde la digestión hasta la respuesta inmunitaria. Hasta ahora, solo se han realizado unos pocos estudios a gran escala que han investigado cómo las diferentes dietas afectan la composición de las bacterias intestinales.
Este estudio, que también recibió fondos europeos, se enfocó en particular en las diferencias y consecuencias de las distintas dietas en el microbioma. Los resultados muestran que los patrones de dieta moldean el microbioma intestinal, ya que no sólo determinan los microbios necesarios para la digestión, sino también la adquisición de microbios directamente de los propios alimentos.
Los análisis realizados en el Laboratorio de Metagenómica del Departamento de Cibio de la Universidad de Trento indican que, en promedio, los veganos poseen las dietas más saludables, seguidos por los vegetarianos y omnívoros. Sin embargo, los datos más interesantes surgieron del estudio de la diversidad del microbioma intestinal, es decir, evaluando la variedad de bacterias que habitan nuestro intestino.
En general, la diversidad fue menor en vegetarianos y veganos en comparación con los omnívoros, aunque los científicos aclaran que la diversidad por sí sola no es un indicador confiable para determinar la salud del microbioma, ya que no considera la calidad y funcionalidad de las bacterias.
«A medida que más personas adoptan dietas veganas y vegetarianas, queríamos descubrir cuán diferentes son sus microbiomas y qué microorganismos son responsables de estas diferencias», comenta Gloria Fackelmann, primera autora del estudio e investigadora del Departamento de Cibio. El grupo investigador, que también incluye académicos del King’s College de Londres (Reino Unido), estuvo liderado por Nicola Segata, catedrático de Genética y jefe del laboratorio de metagenómica computacional del Departamento de Cibio.
Las firmas microbianas de las dietas veganas, vegetarianas y omnívoras: Un aspecto clave del estudio fue analizar las diferencias entre los microbiomas intestinales. Los investigadores identificaron cómo cada patrón dietético resulta en una firma microbiana única. Los microbiomas de los omnívoros presentan una mayor predominancia de bacterias relacionadas con la digestión de la carne, como Alistipes putredinis, implicada en la fermentación de proteínas.
Además, los omnívoros también poseen más bacterias asociadas con la enfermedad inflamatoria intestinal y un mayor riesgo de cáncer de colon, como Ruminococcus torques y Bilophila wadsworthia. En contraste, los microbiomas de los veganos muestran una cantidad mayor de bacterias involucradas en la fermentación de fibra, pertenecientes a diversos géneros en los filos Bacteroides y Firmicutes, que ayudan a producir ácidos grasos de cadena corta como el butirato.
Estos compuestos son beneficiosos para la salud intestinal, ya que reducen la inflamación y mantienen un mejor equilibrio con nuestro metabolismo y sistema inmunológico. En resumen, la principal diferencia entre vegetarianos y veganos radica en la presencia de Streptococcus thermophilus en el microbioma de los vegetarianos, una bacteria común en productos lácteos utilizados en la elaboración de yogur.
De esta manera, el estudio resalta que es la calidad de la dieta -más que el patrón dietético en sí- lo que impacta la composición del microbioma. Las personas con hábitos alimentarios más saludables, ya sean veganas, vegetarianas u omnívoras, muestran una composición favorable del microbioma. Esto sugiere que, independientemente del tipo de dieta, aumentar el consumo de alimentos de origen vegetal y reducir los de origen animal, especialmente si son altamente procesados, puede ser beneficioso para la salud intestinal.
Un aspecto innovador de la investigación fue el análisis de cómo las bacterias se transfieren de los alimentos al microbioma. Los científicos encontraron que los veganos mostraban la menor cantidad de bacterias relacionadas con los alimentos en el microbioma, exceptuando aquellas derivadas de frutas y verduras, que eran las más abundantes. En contraste, vegetarianos y omnívor